GOCTA

Habia viajado a Chachapoyas desde Rioja, donde iba a encontrarme con mis amigas que llegaban de Trujillo aprovechando feriado largo. La idea era principalmente conocer Kuelap y Gocta. El primer dia hicimos el tour a Kuelap y estuvo muy bien, pero el segundo día que tocaba Gocta, por motivos de trabajo tenía que adelantar mi regreso a Rioja. Eso me malogro los planes y me sentía apenada porque no sabía si tendría otra vez la oportunidad de regresar a Chachapoyas. Deje el hotel, y mochila al hombro me fui al paradero de autos a Pedro Ruiz, para variar no había carros y espere como media hora hasta que llegaron dos chicas a preguntar si iba a Gocta, les dije que no que ya me regresaba a Rioja de urgencia. Ellas querían alquilar un auto para irse a Gocta, pero no había más gente. En la espera, entre conversa y conversa me animaron para que me quede y vaya con ellas. La verdad, no les fue tan difícil convencerme, porque sí yo había viajado a Chachapoyas, era para conocer Kuelap y Gocta, y me estaba regresando sin conocer esta catarata.

Tomamos el auto que va a Pedro Ruiz , nos cobro 10 soles a cada una y nos dejó en la entrada de Cocachimba. Desde ahí según mi nueva amiga Doris, eran 30 minutos caminando hasta la plaza de ese pueblito; empezamos a caminar con un sol intenso, y no pasaron ni 10 minutos para volverse pesada la caminata pues la mochila me pesaba.






Por, suerte paso una camioneta que se dirigía al pueblo, y aprovechamos en pedirle una “jaladita”; el señor que manejaba la camioneta nos llevo y nos dejo en la caseta donde se paga la entrada para Gocta. Si no nos hubiera ayudado, yo creo que máximo llegamos hasta Cocachimba, porque si era una ruta considerable de caminata, solo Doris estaba acostumbrada a caminar pero creo que para Cecilia que venía de Lima y para mi, nos hubiera sido muy complicado.
En Cocachimba, ubicamos la casa donde se pagan las entradas, que nos costo 5 soles por persona, allí aproveche en dejar mi mochila, comprar unas bebidas y ya sin un bulto que me estorbara emprendimos rumbo. Nos dijeron que aproximadamente son 2 horas de caminata, lo cual lo comprobamos, hay muchas subidas y bajadas; pero el camino estaba en buenas condiciones pues no había llovido por esos días. Eran como la 1 de la tarde cuando ya divisamos más de cerca la imponente catarata, el solo verla de tan cerca me impresiono muchísimo, y me dio fuerzas para el último tramo.








Llegamos por fin a la catarata, la impresionante caída de agua desde tanta altura me cautivo; aunque me habían comentado que no estaba en su máximo nivel; lo que veía para mi era suficiente.
Yo me quede simplemente fascinada viendo como la catarata se imponía en medio de la selva , en el lugar solo estábamos las tres, me atrevía caminar hasta la caída del agua, y termine empapada .




Estuvimos como 1 hora apreciando a Gocta, y tomándonos todas las fotos posibles. Ya recuperadas de la caminata para llegar, pues emprendimos el camino de vuelta.
La verdad se nos hizo pesada la vuelta, yo iba rezagada, pero no quedaba de otra que seguir caminando. Creo que el regreso lo hicimos en más tiempo. En Cocachimba aprovechamos en almorzar, eran como las 3 de la tarde. Fuimos a la casa de información a recoger mi mochila, y preguntamos donde almorzar, nos indicaron un restaurante que estaba al final de la calle que lleva al camino a la catarata. Alli almorzamos, yo pedi pollo a la plancha y estuvo muy sabroso y me costo 10 soles.
Ya cuando terminamos de almorzar eran ya las 4 de la tarde, como nosotras habíamos ido por nuestra cuenta, pues no teníamos un vehículo que nos regrese. La señora que vendía los boletos a Gocta, se ofreció a llamar a un auto, pero lo esperamos por una hora y no llego. Para suerte de nosotras, había un mototaxi estacionado en medio de la plaza, donde un grupo de chicos jugaban futbol en la cancha de gras. Preguntamos si se iba a Pedro Ruiz o Chachapoyas, el dueño dijo que a Pedro, pero cuando acabe de jugar; así que no nos quedo de otra que esperarlo hasta que acabe de jugar su partido. A las 6 de la tarde a bordo del mototaxi nos fuimos hasta Pedro Ruiz, nos cobro 20 soles en total. De allí en Pedro Ruiz tomamos un auto a Chachapoyas, que estaba a 10 soles cada una, y llegamos como a las 8 de la noche.
Asi terminó la aventura Gocta, fue inolvidable y espero poder regresar pero esta vez a la primera caída, donde el ingreso es por San Pablo y el camino es más duro, pero según me comentaron la vista es más impresionante que la de la segunda caída, donde estuvimos.
Pues estará pendiente eso, y mi visita a Karajia. Muy agradecida a mi nueva amiga Doris, que es de Chachapoyas y que ya conocía la ruta a Gocta; a Cecilia que me convencieron para ir a Gocta . Es grato encontrarse con personas viajeras y aventureras con quien compartir estas experiencias.




Un dato adicional, me hospede en el Hotel Puma Urco , a 35 soles la noche más desayuno. El Tour a Gocta esta 40 dependiendo el número de personas; como saben yo opte por irme en ruta.

Publicado porRina_ en 8:23 0 comentarios